Progresos de aprendizaje

Hoy en día siento que finalmente he aprendido a llevar esta ciudad, y cada vez tengo menos altibajos. Con el tiempo mi trabajo como extra para películas ha ido evolucionando y hoy en día trabajo como Actor y Modelo en diferentes partes del mundo. Ahora comprendo casi todo lo que escucho en las calles de Berlín, aunque mi gramática sigue siendo bastante mala. Fue por lo mismo que luego de un año y medio sin asistir a clases sentí deseos de volver a tomar un curso.

Fue gracias a mi amiga Chilena Kira que descubrí Kapitel Zwei, y la verdad estoy muy contento en la Escuela. De partida el horario de lunes a jueves me acomoda muchísimo, ya que siempre necesito hacer trámites, ya sea; visitar departamentos para arrendar, ir a aclarar estados de impuestos o visitar nuevas agencias. Tener un día de la semana completamente libre me da libertad de atender también mi vida personal y no solo la escuela. Por otra parte, la duración de 3 horas de las clases es perfecto para mí, ya que mi concentración no dura más que eso (esto lo corroboré en mi antigua escuela donde la jornada se me hacía eterna). Por otra parte su ubicación es perfecta, ¡Alexanderplatz es el centro de la ciudad! Por lo que, independientemente, si me mudo de un extremo de la cuidad al otro, la escuela siempre estará cerca y después de clases puedo pasarme a hacer cualquier tipo de compras o tramites, ya que absolutamente todo está a su alrededor. Los libros que usamos también me han gustado mucho ya que hablan de personas para personas y son muy precisos, tienen buena estructura y son compactos, por lo que generalmente no quedan capítulos enteros incompletos como me pasó con otros libros que pretendían abarcar demasiado. Al igual que los libros, los cursos también son pequeños y no superan las 10 personas, eso hace que la clase avance rápido y sea dinámica. Y mi profesor habla muy claro y pausado, por lo que he disfrutado mucho de aprender con él, aunque sólo llevo unas semanas en la escuela me siento mucho más preparado que antes de comenzar mí curso.

Así, he corroborado que es Berlín la cuidad donde quiero vivir y formar mi hogar, por lo que estoy a la búsqueda de un departamento, lo que no es fácil, dado la demanda y la burocracia de este país. Pero desde que retomé mis clases de alemán me siento mucho más preparado para finalizar mi integración en Alemania, y a su vez, me ha incentivado positivamente para lograr presentar sin miedos mi “Einkommensnachweise” o la temible “Mietschuldenfreiheitsbescheinigung” que antes no podía ni pronunciar.